[rel txt=»Esta materia posee contenido relacionado.»][gravata]Las heladeras están cada vez más tecnológicas. ¿Cómo los refrigeristas acompañan la evolución de tanta tecnología embutida en el sistema?[/gravata] Las innovaciones y tecnologías que ya han modificado a los televisores y teléfonos móviles, ahora invaden las cocinas y ya están presentes en modelos de refrigeradores de alta capacidad. También conocidos como “heladeras inteligentes”, esos equipos son una tendencia para cocinas modernas y un nuevo reto en el trabajo de los refrigeristas. Ahora, además del conocimiento en refrigeración, esas heladeras le exigen al técnico una base en informática o electrónica, ya que algunas funciones del sistema son controladas por un panel digital instalado en la puerta del refrigerador. 
Mucho más que un refrigerador común, las heladeras high tech (alta tecnología), presentan funciones innovadoras para facilitar la vida del consumidor. Además de la función touch screen, que permite que se determine su funcionamiento por un roce en la pantalla, ellas poseen entrada USB para la conexión con pendrives (dispositivos de memoria que permiten insertar nuevas recetas de comida a su programación, por ejemplo). Las heladeras revolucionarias también vienen equipadas con diversos aplicativos que gobiernan la fecha de los alimentos y ayudan a crear una lista de supermercado. Y más, se puede ver en su panel fotos de la familia o de recetas, imanes digitales con mensajes importantes e incluso un calendario.
Ya existen modelos que permiten incluso hacer compras en línea. De acuerdo con la agencia de encuestas de mercado Gartner, hasta el 2020 más de 30 mil millones de equipos y electrodomésticos utilizarán Internet y el técnico necesita estar preparado para este mercado. ¿Ya imaginó un refrigerador que controla automáticamente la temperatura interna del refrigerador y posee programación para resfriar más rápido los postres o helar de prisa las bebidas? Otros recursos inteligentes que indican la temperatura alta, la puerta abierta e, incluso, la necesidad del cambio de filtro, ayudan a mantener el buen funcionamiento de la heladera.
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EL COMPRESOR DEL FUTURO
Este año Embraco lanzó el primer compresor sin aceite del mundo posibilitándole al mercado dar un salto tecnológico con esa nueva evolución. ¿Qué cambia en el trabajo del técnico frente a un compresos que dispensa el uso de aceite? Además del formato menor y nuevas funcionalidades que traen beneficios incluso en la reducción del 20% del consumo de energía, esta tecnología posibilita también formas diferentes de instalación del compresor permitiendo una gran innovación en el diseño de los refrigeradores. Lea más en el artículo Tecnología Embraco Wisemotion. [/box]
Panel electrónico: pros y contras
Algunos paneles electrónicos son de LED e incluso consumen menos energía. Pero, ¿y cuando ellos presentan algún problema? ¿A quién piensa llamar el consumidor? ¿Al técnico refrigerista o a un técnico en informática? “Técnico de refrigeración no hace reparos de electrónica, cambia piezas”, dijo el técnico Izaias Oliveira, de Rio de Janeiro, al explicar que el refrigerista irá a cambiar la pieza entera que está presentando defecto al revés de tratar de detectar algún problema aislado en la placa. Sin embargo, él afirma también que se necesita tener conocimiento pleno sobre refrigeración para verificar, sin duda, que el defecto no es del sistema de refrigeración y que, por ello, puede ser en el sistema electrónico.
Ya en la opinión del refrigerista Rafael Henrique Prediger, de la ciudad de Lindolfo Collor, en Rio Grande do Sul, tener conocimiento sobre informática y electrónica ayudan: “Aunque el técnico de refrigeración no repare la placa y solamente la cambie, pero, con una base de electrónica sabrá mejor identificar el defecto, y lo más importante, sabrá identificar el origen del problema”, afirma. Uno de los problemas que puede ocurrir con heladeras touch screen es quemar la placa madre por las constantes bajas de energía, por ello, el mejor truco para pasar al cliente es que se prevenga. Al fin será menos dispendioso para él comprar un estabilizador de corriente que una placa nueva que podrá costar hasta 600 reales. El técnico necesita estar preparado para trabajar con esas diferentes tecnologías visto que las heladeras digitales vinieron para quedarse.
