[gravata]El filtro secador correcto es esencial para el buen funcionamiento del sistema de refrigeración.[/gravata]

El filtro secador es uno de los componentes básicos del sistema de re­frigeración, siendo responsable por evitar que impurezas y/o humedad pasen para el elemento de control (tubo capilar o válvula de expansión) o para el propio compresor. Por eso, es esencial que se use un modelo de buena calidad y que sea adecua­do al equipo en donde se instalará. La presencia de trazos mínimos de humedad es común en los sistemas de refrigeración, aun después del proceso de vacuo bien hecho. Por eso, el filtro secador es muy importante. Además de la humedad, el filtro también tiene la función de impedir que pasen partículas sólidas como astillas metálicas de acero o cobre, residuos de soldadura y otras, que pueden provocar que se tape y otros problemas.

Cuando la humedad o las impurezas tapan el tubo capilar total­mente, una reoperación del sistema de refrigeración se requiere y con eso se hace indispensable que se cambie el filtro, nunca olvidando también que la limpieza de los otros componentes es necesaria. Pero, muchas veces la obstrucción es parcial, llevando a la caída de rendimiento del sistema de refri­geración. En este caso, el problema puede ser incorrectamente atribuido al compresor o a la carga de fluido refrigerante. Por ello, se necesita hacer un análisis detallado de la situación antes de iniciar el trabajo.

Sustitución del Filtro Secador
Toda vez que se haga una reoperación del sistema de refrigeración es obligatoria la sustitución del filtro secador por uno nuevo, pues como el filtro queda saturado de agua, el desecante no puede más absorber humedad, no pudiendo reaprovecharse el filtro secador. Nunca se debe elegir el fil­tro secador solamente por el tamaño y mucho menos por el precio. Se deben observar criterios técnicos y las orientaciones de los fabricantes de esos componentes, pues se lleva en consideración la compatibilidad del filtro con el fluido refrigerante y aceite lubricante, recordando siempre que solamente se deben usar modelos que contengan desecantes del tipo mo­lecular sieves (MS). Es necesario estar atento también a la cantidad de molecular sieves del filtro, pues la elección de un modelo inadecuado podrá hacer con que ocurra movimiento de las  esferas de MS, llevando a la liberación partículas.

Para la selección, es especialmente impor­tante estar atento al fluido refrigerante uti­lizado en el sistema. Por ejemplo, gene­ralmente filtros secadores proyectados para uso con R600 (isobutano) son muy frágiles para trabajar con R134a, por causa de la diferencia de presión de trabajo entre estos dos fluidos refrigerantes. Eso puede llevar al desgaste de las partículas desecantes, y los residuos pueden pro­vocar que se tape la salida del filtro o el tubo capilar. El cuadro en la parte inferior de esta página muestra los mo­delos adecuados para uso con cada fluido refrigerante. Para el funcionamiento adecuado, el filtro secador necesita ser instalado en la posición correcta, que varía de acuerdo con el tipo de sistema de refrigeración. Caso eso no sea hecho, las partículas desecantes pueden despegarse y perjudicar el funcionamiento del sistema de refrigeración. [tb cols=»FLUIDO REFRIGERANTE,FILTRO SECADOR RECOMENDADO» infos=»R290,XH5 – XH6 – UNIVERSAL (MS594) , R134A,  XH7 – XH9 – UNIVERSAL (MS594),R600A, XH5 – XH6 – UNIVERSAL (MS594) , R22, XH6 – XH9 – UNIVERSAL (MS594), MISTURAS (BLENDS), XH9 – UNIVERSAL (MS594) «]